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British Journal of Nutrition
Adherir a una dieta saludable se asoció con una mejora en la función vascular
Una dieta baja en grasas y azúcares pero con alto contenido de frutas y verduras también  se asoció con un perfil de riesgo CV favorable.


Adherir a una dieta baja en grasas (especialmente las saturadas) y azúcares pero con alto contenido de frutas y verduras también  se asoció con una mejora en la función vascular y con un perfil de riesgo cardiovascular favorable.

Así lo sugiere el estudio “Adherence to a Dietary Approaches to Stop Hypertension (DASH)-type diet over the life course and associated vascular function: a study based on the MRC 1946 British birth cohort” (British Journal of Nutrition. Vol: 119 Nro: 5 Págs: 581 - 589 Fecha: 01/03/2018), elaborado por investigadores de la Universidad de Southampton y el Global Centre for Nutrition and Health, ambos de Gran Bretaña.

Los investigadores notaron que poco se sabe acerca de las asociaciones a largo plazo entre los abordajes dietéticos para detener la hipertensión (DASH) y los factores de riesgo cardiovasculares (CV) convencionales, así como nuevas medidas de la función vascular.

Por eso realizaron este estudio, que tuvo como objetivo examinar si la adherencia a largo plazo a una dieta DASH en una cohorte de nacimiento se asocia con factores de riesgo CV convencionales y dos marcadores de función vascular: espesor de la íntima media carotídea (CIMT) y velocidad de la onda de pulso (VOP) .

La dieta DASH se caracteriza por una gran proporción de frutas, verduras, productos lácteos bajos en grasa y alimentos integrales. Pero además, este tipo de dieta es baja en grasas saturadas y azúcar refinada.

Los datos provinieron de 1.409 participantes de la Encuesta Nacional de Salud y Desarrollo del Medical Research Council (MRC) de Gran Bretaña. La ingesta dietética se evaluó a los 36, 43, 53 y 60-64 años utilizando diarios alimentarios estimados 5-d. El puntaje de dieta DASH se calculó utilizando el índice de Fung.

Se midieron los factores de riesgo CV convencionales (presión arterial y lípidos), CIMT en la arteria carótida común derecha y / o izquierda y PWV cuando los participantes tenían entre 60 y 64 años. Las asociaciones entre el puntaje de la dieta de tipo DASH y los resultados se evaluaron mediante modelos de regresión múltiple ajustados por la posición socioeconómica, el IMC, el tabaquismo y la actividad física.

Los participantes en los mayores quintiles (según sexo) (Q) de la dieta de tipo DASH a largo plazo tuvieron una presión arterial más baja (P≤0 · 08), un colesterol de HDL más alto (p <0 · 001) y triglicéridos más bajo (p <0 · 001) comparado con personas en el primer quintil.

Los participantes en el quintilo más alto de la dieta de tipo DASH a largo plazo tuvieron una Velocidad de onda de pulso más baja (-0 · 28 SD, 95% CI -0 · 50, -0 · 07, p para tendencia = 0 · 01) y cIMT (-0 · 24 SD; 95% CI -0 · 44, -0 · 04, p para tendencia = 0 · 02) en comparación con los participantes en el primer quintilo. Esta asociación fue independiente de los factores de riesgo CV convencionales.

El estudio permitió concluir que la adhesión a largo plazo a una dieta de tipo DASH se asocia con un perfil de riesgo CV favorable en la edad adulta. También se observó una relación entre la adherencia a largo plazo a una dieta de tipo DASH y la función vascular mejorada, que no fue explicada por los factores de riesgo CV convencionales.