ENFERMEDAD PSIQUIÁTRICA Y ALCOHOLISMO
Tener problemas con el alcohol puede acarrear otras adicciones y problemas mentales
Desórdenes causados por el uso del alcohol
En Colombia el 9% de la población tiene trastornos con el alcohol. Dentro de ese grupo de halló una alta prevalencia de trastornos mentales. El caso colombiano puede servir de ejemplo de lo que sucede en otras sociedades como consecuencia del abuso de sustancias.
Los individuos con problemas por consumo de alcohol son más proclives a padecer trastornos mentales y a adquirir otras adicciones, según se desprende de un estudio realizado por la Universidad Valle de Lili
"Alcohol use disorders and psychiatric diseases in Colombia", basado en datos gubernamentales de la población colombiana entre 2003 y 2004.
Con esta base de datos provista por el gobierno de Colombia, se buscó determinar las asociaciones de vida entre los trastornos por consumo de alcohol y otros desórdenes mentales y adictivos en personas de edades comprendidas entre los 18 y los 65 años.
Las conclusiones determinaron una alta prevalencia de desórdenes mentales en la población adulta con trastornos por consumo de alcohol en Colombia pero que pueden extenderse a otros países de la región y el mundo. También surgió como dato central la comorbilidad como signo de gravedad de la enfermedad y el consecuente impacto en la salud pública. En este sentido, se destacó la necesidad de formar más profesionales y el desarrollo de intervenciones y servicios apropiados.
Para este estudio se realizaron varios análisis estadísticos: pruebas de diferencia en la prevalencia de los trastornos mentales en función si el individuo tenía trastornos con el alcohol: análisis estratificado por sexo y análisis de regresión logística tomando las variables de estado de salud, demografía, estatus socio-económico, de comportamiento y de auto-reporte.
Las personas con trastornos por consumo de alcohol fueron el 9% de la población, de los cuales el 88% fueron varones y en promedio tenían 37 años. Estas personas tenían trabajo y eran fumadores activos. Esta población tenía mayores posibilidades de cumplir con los criterios de todos los trastornos mentales, excepto el trastorno depresivo menor, el trastorno de estrés post-traumático, la dependencia de la nicotina y el trastorno oposicional desafiante.