INFORME DE LA OMS
El tabaquismo retrocede ante las políticas activas de los gobiernos
En los últimos años creció al 63% la población protegida contra la epidemia de tabaquismo.
En los últimos diez años, las políticas públicas contra la epidemia de tabaquismo han logrado que el 63 por ciento de la población mundial esté protegida por al menos una política de control del tabaco, cuando en 2007, la población protegida era de apenas el 15 por ciento.
Este avance surge del último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre tabaquismo que revela también un aumento significativo del número de países que pusieron en marcha políticas de control del tabaco como advertencias gráficas en los paquetes, prohibiciones de publicidad y establecimiento de zonas en las que no está permitido fumar.
Las medidas contra el tabaquismo salvaron a millones de personas de una muerte temprana, asegura el informe de la OMS y también apunta que la industria tabacalera sigue entorpeciendo los esfuerzos de los gobiernos por aplicar plenamente intervenciones que pueden salvar vidas y ahorrar costos.
El consumo de tabaco es la principal causa prevenible de muerte en todo el mundo, provocando más de 7 millones de personas cada año, con costos económicos enormes por más de 1,4 billones de dólares en costos de atención de salud y en pérdida de productividad.
“Colaborando entre sí, los países pueden impedir que millones de personas mueran cada año por enfermedades provocadas por el tabaco que pueden prevenirse, y ahorrarse cada año miles de millones de dólares en gastos sanitarios evitables y en pérdida de productividad”, señala el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, y añade: “También deben atajar el comercio ilícito de tabaco, que exacerba la epidemia mundial de tabaquismo y sus consecuencia socioeconómicas y sanitarias”.
Ese 63 por ciento de la población protegida – unas 4700 millones de personas- está bajo la égida de al menos una “práctica óptima” de control del tabaco derivada del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco (CMCT de la OMS), gracias a que los gobiernos han intensificado la aplicación de las medidas principales del CMCT de la OMS.
Las seis estrategias de control del tabaco recomendadas son: vigilar el consumo de tabaco y las políticas de prevención; proteger a la población del humo de tabaco; ofrecer ayuda para el abandono del tabaco; advertir de los peligros del tabaco; hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio del tabaco; y aumentar los impuestos al tabaco.
Según el informe, incluso los países con recursos limitados pueden vigilar el consumo de tabaco y aplicar políticas de prevención y vigilar la injerencia de la industria tabacalera en la tarea normativa del gobierno. Las marcas dedicadas al negocio del tabaco suelen exagerar el peso económico de la industria en la economía, desacreditar los datos científicos demostrados y servirse de la litigación para intimidar a los gobiernos.
“La injerencia de la industria tabacalera en las políticas de los gobiernos constituye un obstáculo mortal para promover la salud y el desarrollo en muchos países pero si vigilamos tales actividades y las frenamos, podemos salvar vidas y sembrar las semillas de un futuro sostenible para todos”, señala el Dr. Douglas Bettcher, director del Departamento de la OMS para la Prevención de la Enfermedades no Transmisibles (PND).
El informe también destaca que 2400 millones de personas tienen a su disposición en 26 países tratamientos para dejar de fumar y que 3200 millones de personas viven en un país que en los dos últimos años emitió al menos una campaña antitabáquica integral.